Cuando pensamos en mantener el agua de nuestra piscina limpia y saludable, el filtro es uno de los elementos clave del sistema de depuración. Pero, ¿cuánto sabemos realmente sobre los diferentes tipos de filtros de piscina? En este post, te explicaremos los tipos más comunes, sus ventajas e inconvenientes, y por qué es esencial contar con un buen filtro en tu piscina.
¿Por qué es importante el filtro de la piscina?
El filtro es responsable de mantener el agua libre de suciedad, hojas, arena, y otras partículas que pueden acumularse. Esto no solo mejora la apariencia del agua, sino que también garantiza un ambiente saludable para los usuarios al prevenir el desarrollo de algas y bacterias.
Además, un filtro adecuado reduce la necesidad de utilizar productos químicos adicionales y prolonga la vida útil de otros componentes del sistema, como la bomba y las tuberías. Y, por tanto, contribuye a mejorar la salud de los bañistas.
Tipos de filtros de piscina
Existen cuatro tipos principales de filtros de piscina: de arena, de cartucho, de diatomeas y de vidrio. Cada uno tiene sus propias características, ventajas e inconvenientes. Te lo explicamos en detalle:
1. Filtros de arena
Este es el tipo de filtro más común debido a su eficacia, facilidad de uso y mantenimiento sencillo. Funciona haciendo pasar el agua a través de un tanque lleno de arena sílica, que atrapa las partículas y la suciedad.
Ventajas:
- Requiere poco mantenimiento.
- Duradero y resistente.
- Económico tanto en el coste inicial como en su mantenimiento.
- Fácil de limpiar mediante el proceso de retrolavado.
Inconvenientes:
- No filtra partículas extremadamente pequeñas (eficacia de filtración de 20-40 micras).
- Mayor consumo de agua durante los retrolavados.
- Puede requerir reemplazo de la arena cada 5-7 años.
2. Filtros de cartucho
Estos filtros utilizan un cartucho de material plisado que atrapa las impurezas cuando el agua pasa a través de él.
Ventajas:
- Mayor capacidad de filtración que los filtros de arena (10-15 micras).
- Menor consumo de agua, ya que no requiere retrolavado.
- Mantenimiento sencillo: solo necesitas lavar o reemplazar el cartucho.
Inconvenientes:
- Menor durabilidad del cartucho: debe reemplazarse periódicamente (cada 1-2 años, según uso).
- Requiere limpieza frecuente, especialmente en piscinas con mucho uso o vegetación cercana.
- Coste inicial algo más alto.
3. Filtros de diatomeas
Considerados los más eficaces, estos filtros utilizan un polvo fino de diatomeas que recubre un conjunto de rejillas internas para capturar incluso las partículas más pequeñas.
Ventajas:
- Capacidad de filtración excepcional (2-5 micras).
- Ideal para quienes buscan agua cristalina.
- Altamente eficiente en la eliminación de suciedad y contaminantes.
Inconvenientes:
- Mayor coste inicial y de mantenimiento.
- Limpieza más compleja: requiere un retrolavado y renovación del polvo de diatomeas.
- Manejo del polvo requiere precaución, ya que puede ser irritante.
4. Filtros de vidrio
Una alternativa moderna a los filtros de arena, los filtros de vidrio utilizan vidrio reciclado triturado como medio filtrante. Este tipo de filtro se está volviendo cada vez más popular debido a su eficiencia y sostenibilidad.
Ventajas:
- Filtra partículas más pequeñas que los filtros de arena (hasta 5 micras).
- Reduce la formación de bacterias gracias a su superficie no porosa.
- Menor consumo de agua durante el retrolavado.
- Mayor durabilidad del medio filtrante: el vidrio puede durar hasta 10 años.
Inconvenientes:
- Coste inicial más alto en comparación con los filtros de arena.
- Requiere una instalación adecuada para aprovechar al máximo sus beneficios.
¿Cuál filtro es el adecuado para tu piscina?
En este punto, seguramente te preguntarás cómo elegir el filtro que mejor se ajusta a tu piscina. En este sentido, es importante tener en cuenta que contar con el asesoramiento de técnicos especializados es, siempre, la mejor garantía.
No obstante, la elección del filtro depende de varios factores:
- Tamaño de la piscina: las piscinas grandes suelen utilizar filtros de arena o vidrio debido a su durabilidad y bajo mantenimiento.
- Nivel de uso: si la piscina tiene un uso intensivo o está en un entorno con mucha vegetación, los filtros de cartucho, vidrio o diatomeas pueden ser mejores opciones.
- Presupuesto: los filtros de arena suelen ser, en este caso, la opción más económica, mientras que los de vidrio y diatomeas requieren una inversión mayor.
Consejos para mantener tu filtro en óptimas condiciones
El mantenimiento de los filtros de piscina es una de las tareas más importantes no solo durante la temporada de uso de la piscina, sino también en invierno. Un buen mantenimiento es clave para evitar tener que cambiar el agua de un año a otro, lo que se traduce en más eficiencia y en un ahorro de agua muy importante.
- Limpieza regular. Sigue las recomendaciones del fabricante para limpiar o retrolavar el filtro.
- Revisión periódica. Inspecciona el filtro para detectar posibles daños o desgastes.
- Cambio de medios filtrantes. Sustituye la arena, los cartuchos, el polvo de diatomeas o el vidrio cuando sea necesario.
Como ves, el filtro de la piscina no solo es esencial para mantener el agua limpia, sino también para alargar la vida de toda la instalación y garantizar la salud de los usuarios. Elegir el filtro adecuado y mantenerlo en buen estado te ahorrará tiempo y dinero a largo plazo.
Si tienes dudas sobre qué filtro es el mejor para tu piscina, no dudes en contactarnos. En EMPIA somos especialistas en el mantenimiento de piscinas y estaremos encantados de asesorarte para que disfrutes de una piscina limpia y segura todo el año.